Lo veo...

Veo los estados y subnicks de la gente que tiene amor, que tiene a alguien al lado que le susurra "te amo" al oído... Veo muchas fechas, muchos corazones, caritas sonrojadas, colores... mientras que el mío dice "~ La distancia separa personas, pero no sus corazones...". Ni corazones ni caritas. Sólo una frase entre mil que resumen mi vida ahora mismo. ¿Tú te crees de verdad que aguanto ver tantas parejas que se dan la mano, que se besan, sin complejo ninguno de dónde y cuándo están? ¡Pues claro que no! He soñado bastantes veces con ese momento en el que paseamos de la mano... solas. Tranquilas, mi risa rodeando tu cuerpo, mientras tus susurros me acurrucan junto a tu pecho... son demasiados sueños.

Y lo peor de todo, es que en mis sueños, lo veo. Veo mi mayor deseo, delante de mí, sin poder hacerlo realidad hasta dentro de dos años. ¡Dos putos años! El tiempo pasa, y aunque sea invisible, lo veo.
Todo es tan complicado... ojalá la inocencia no se hubiera perdido tan pronto, a la temprana edad de ocho años... ojalá nunca hubieran roto mi caparazón de inocencia... inocencia. La echo de menos... y a la inocencia también. Pero a ella mucho, mucho más. A su lado no necesito ser inocente, quiero ser culpable, culpable de todas sus sonrisas, susurros, gemidos... ¡todo! Quiero ser suya, pero es solo un simple texto... y mientras lo escribo, lo veo.
Veo como el tiempo pasa, ralentizándose cada vez más...
- Te amo, y a pesar de todo soy tuya -, escribo en mi brazo con letra ilegible... nadie entiende lo que escribo, pero yo sí, porque lo siento, lo vivo y lo veo. Lo veo.
A veces desearía ser ciega, para no ver cómo te arrancan de mi pecho, muy lenta y dolorosamente... no quiero verlo, aunque sentirlo, siempre lo sentiré. Sentiré y siento no haber hecho nada cuando podría haberlo hecho, cuando podría haber escapado en el mismo instante que la policía me pilló a las cuatro y media de la madrugada, caminando hasta tu casa, en el túnel de Luengo... lo ví, lo viví, y ahora lo siento. Lo siento, mi amor... pero te amo, y aunque tú a mí también, veo cómo nos separan AHORA, HOY, AQUÍ.

No podrán hacer nada. No. Nunca. ¿Por qué? Porque el amor, separa personas, pero no corazones... y ahora lo veo.